Arminio Guajardo Morandeira
El 8 de agosto de 1936 es fusilado en Calatañazor
(Soria) el médico libertario Arminio Guajardo Morandeira –algunas fuentes citan
erróneamente su nombre como Herminio o Armiño y su linaje como Morandeiza .
Había nacido el 28 de enero de 1899 en Madrid. Estudió el bachiller y la
carrera de medicina en Zaragoza y en 1930 se licenció en la universidad de esta
ciudad, especializándose en cirugía y en partes. También fue torero.
En 1931 pasó a ejercer como médico
rural titular en Almarza (Soria), donde fue conocido como «el médico de los
pobres», debido a su especial atención a los pacientes sin recursos, por lo que
tuvo varios enfrentamientos con miembros de la derecha local. Durante el
llamado Bienio Negro republicano (1933-1935), sufrió detención gubernativa por
su defensa de las causas popular y por su pensamiento anarquista.
Organizó en Almarza la Federación
Local de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT); colaboró, con la matrona
municipal de Soria y anarcosindicalista Constantina Alcoceba Chicharro, en el
Ateneo de Documentación Social (ADS), centro cultural anarquista de la ciudad
de Soria; y publicó artículos en Trabajo , órgano anarcosindicalista soriano.
Parece que también perteneció a la Federación Anarquista Ibérica (FAI). En
diciembre de 1935 fue sancionado con una multa de cinco pesetas por el Colegio
de Médicos de Soria por haberse negado a votar en la Junta General Ordinaria de
esa institución.
Cuando el levantamiento fascista de
julio de 1936, pudo escapar hacia las poblaciones sorianas de Segoviela y
Almajano, pero, cansado de huir, finalmente se entregó a los sublevados
franquistas en el Gobierno Civil de Soria. Pocos días después, el 8 de agosto
de 1936, Arminio Guajardo Morandeira fue fusilado en el cementerio de Calatañazor
(Soria), junto con los maestros José Buill y Vicente Soria, el
anarcosindicalista José Andrés, el oficial de el Ayuntamiento de Soria y
colaborador habital del periódico La Voz de Soria Mariano Cabrujas, y una
persona más de la que desconocemos su nombre.
Incoado expediente por
responsabilidades políticas, fue sancionado con 15.000 pesetas, multa que tuvo
que pagar la viuda; también, al no poder pagar las contribuciones, fue
embargado. Pese a la solicitud de su esposa en 1941, para inscribirlo como
difunto en el Registro Civil, fue declarado por el juzgado como
"desaparecido", en ausencia de testigos directos de su muerte.
ALEN
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