ANSELMO LORENZO VISITA PUERTO REAL EN
1872
Extraído del libro: El proletariado
militante
Las amenazas gubernamentales contra La
Internacional, precursoras de una persecución que no podía tardar en iniciarse,
tenían alerta al Consejo federal. Bien lo prueban los manifiestos preinsertos,
en los cuales se revela además que el temor no era tenido en cuenta para nada y
que el propósito de tener en tensión la energía revolucionaria no cedía ante
ningún género de consideraciones.
En previsión, pues, de la persecución
o de tentativas revolucionarias por parte de los republicanos, formuló el
Consejo un plan de organización clandestina que podría reemplazar a La
Internacional en caso de que esta asociación fuera violentamente disuelta, y
que sirviera además para impulsar un movimiento revolucionario si los
republicanos se determinaban a iniciarlo.