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domingo, 6 de septiembre de 2020

ASESINATO DE MANUEL BRAVO PORTILLO


Asesinato de Manuel Bravo Portillo

El 5 de septiembre de 1919 en Barcelona (Cataluña) es asesinado por un pelotón anarcosindicalista el excomisario de policía, organizador de los atentados contra los sindicalistas de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), figura clave de la lucha del Estado contra anarquismo, Manuel Bravo Portillo (o Brabo Portillo).

Había nacido en 1876 en la isla de Guam (Las Marianas, Micronesia) y vivió en Filipinas con su padre, militar de profesión. Combatió los independentistas filipinos en Cavite (1896) y fue ascendido a teniente. Repatriado a la metrópoli por enfermedad en 1897, ingresó en el Ministerio de Hacienda. Se casó con Remedios Montero, hija de militar.

En 1908 ingresó en el recién creado Cuerpo de Policía y ascendió en un año a inspector jefe. Destinado a Barcelona a partir de 1909, se mostró contundente durante los hechos de la Semana Trágica, y fue condecorado y ascendido a comisario -el más joven de España. En esta época ya creó una red de confidentes con la que vigilaba los círculos anarquistas y la delincuencia común.

Durante la Gran Guerra trabajó para el espionaje alemán a cambio de grandes sumas de dinero, organizando un tráfico ilegal de emigrantes, realizando negocios con los bajos fondos, etc. En 1918, con el apoyo de la burguesía catalana, se le da el mando de la Brigada Especial y declara la guerra a los anarcosindicalistas (provocadores a los mítines, bombas en los locales sindicalistas para provocar su clausura, detenciones ...), al tiempo que se dedica a negocios personales (estraperlo, espionaje, extorsión ...).

En ese mismo 1918 participó en la organización del asesinato del industrial Josep Albert Barret y Moner, que fabricaba material de guerra para los aliados. Fue denunciado, con pruebas concluyentes, por el anarcosindicalista Ángel Pestaña desde las páginas de Solidaridad Obrera y fue procesado, condenado, destituido y encarcelado en julio de 1918; pero, liberado después de tres meses, continuó al servicio del capitán general de Cataluña, Joaquim Milans del Bosch organizando atentados contra los sindicalistas de la CNT.

Fue asesinado por un grupo de anarcosindicalistas radicales, encabezado por Progreso Ródenas, en represalia por el asesinato de Pablo Sabater y Lliró, presidente del Sindicato de Tintoreros del Ramo Textil de Barcelona de la CNT, del 18 de julio de 1919.

Cuando a mediodía se supo que la habían asesinado hubo fiesta en los barrios obreros de Barcelona; la policía sólo encontró en el lugar del asesinato una gorra, nueva, y hacia sombrerería la quiso reconocer. Pero la banda que había organizado Bravo Portillo no se disolvió, sino que actuó con un nuevo jefe, el barón de Koening.

ALEN

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